Acerca de este blog
Mi historia
Hola! Mi nombre es Eduardo, jugador mexicano de go, bajo el nombre de ESMP en prácticamente todos los servidores (Edelgrim, en aquellos que no lo permitieron). Mi fascinación por el go comenzó precisamente, en marzo de 2002; tras el lanzamiento de la película: “Una Mente Brillante”, en el cine. Haciendo una retrospectiva, la verdad es que no entiendo cómo logró captar mi interés un juego que es protagonista, durante escasos 2 minutos, en la escena de una película y del que además, no dicen nada respecto a cómo se juega. Quizá esa es la magia del Go. Lo que sí sé con certeza es que llegó a mí para quedarse.
Durante los meses siguientes de haber visto la película, busqué por todos lados acerca del juego en internet. Encontré información de las reglas y algunas técnicas en muchas páginas que aun existen hoy en día como: The Fun Way to Go del mismísimo Nihon Ki-in o El camino interactivo hacia el Go, etc., pero la verdad es que para ese entonces, encontrar información exhaustiva sobre el go no era tarea fácil. Incluso hoy en día no es un tema que acapare los reflectores, por lo que tuve que mirar hacia otras opciones; libros.
Al poco tiempo, realicé lo que vendría a ser mi primera compra por internet; coloqué un pedido en Amazon.com: Teach Yourself Go por Charles Matthews y The Second Book of Go por Richard Bozulich, con lo que me adentré más en el estudio del juego. Sin embargo, aún después de leer esos libros, me sentía bastante inseguro como para jugar por internet contra gente real, así que…
Para jugar, comencé con partidas contra la computadora con el software IgoWin (qué tiempos aquellos, ¡todavía usaba yo Windows!) que es la versión gratuita en un tablero de 9x9 del Many Faces of Go de la misma compañía; Smart Games. Fue tal mi obsesión por jugar ese juego que pronto tuve que empezar a evangelizar, ya que jugar contra la computadora no era lo más emocionante para mí. Comencé por enseñar el juego a mis tres mejores amigos, pero lamentablemente solo uno de ellos (mi mejor amigo) me siguió la corriente… con el tiempo he llegado a la conclusión de que si la decisión de querer jugar Go no surge de uno mismo, entonces por más sermones que uno dé a la gente sobre lo hermoso del juego y sus beneficios, sencillamente no la atrapará. El caso es que yo era feliz de tener al menos a una persona con la cual jugar en vivo y en directo y con eso me bastaba.
Tiempo después terminé armándome de valor y comencé a jugar por internet; en tablero de 19x19. Como es de esperarse y probablemente cualquier jugador de Go estará de acuerdo… fui aplastado sin misericordia en cada uno de mis juegos. Eventualmente (y probablemente porque así lo dictan las ciencias de probabilidades y no tanto porque hubiese mejorado) gané mis primeros juegos.
El go es un juego simple (son hay que colocar piedras y hay como 4 reglas en total) pero es un juego extremadamente complejo (muchas variantes posibles). Muchas veces se confunde simple con fácil, pero no voy a negar que jugar go y volverse bueno en él es un proceso lento, difícil y que requiere de un corazón de piedra y templanza de santo para soportar las múltiples frustraciones de perder repetidamente y para no llorar sin parar y salir corriendo. Pero no hay por qué asustarse, aun si pareciera que por lo que digo, aborrezco el juego. El go es apasionante y extremadamente divertido cuando entiendes su naturaleza. A propósito de lo anterior, hay una reseña muy amena y bastante acertada que hicieron los del canal de Shut Up & Sit Down en Youtube que vale la pena ver.
¿Por qué decidí iniciar este blog?
“No vayas por donde el camino te lleve. Ve en cambio por donde no hay camino y deja rastro” ~ Ralph Waldo Emerson
En la terminología del go, estar en gote (lit. mano sucesora) implica falta de iniciativa. Se trata de una jugada que lleva al jugador a encontrarse en una posición de pasividad que, de mantenerse así durante la mayor parte del juego, difícilmente podrá alcanzar al contrincante por encontrarse a la expectativa de sus movimientos y al final de cuentas, perder el juego. La situación contraria al gote, se le conoce como sente (lit. mano antecesora) o iniciativa. Se trata de una posición activa; favorable, donde se tiene el control y flujo del juego. Lo ideal es mantenerse en esta postura la mayor parte del juego.
Entonces, ¿por qué De Gote a Sente? Para mí es como una analogía a mi vida. Aunque pareciera que mi entusiasmo por el go es abrumador, durante los últimos años de mi vida he sentido que me la he pasado en la pasividad. Y no solamente en el ámbito del go, sino en general. No sé en qué momento dejé de ser un precursor y me volví un espectador. Entré en un periodo de recesión absoluta donde dejé de jugar go por completo. Durante un tiempo incluso, no quise saber nada de él. Me daba miedo iniciar una partida por sentir que no era suficientemente bueno y que si jugaba y perdía solamente traería tal frustración que al final de cuentas haría que, en lugar de divertirme, me la pasara muy mal. Por lo tanto, entré en una zona de confort donde prefería ahorrarme el sentimiento y mejor dejar de jugar. Sin embargo esa es la manera más cobarde de enfrentar una situación. Es por eso que quiero pasar de gote a sente en mi vida. Este espacio pues, está destinado a documentar mi camino de salida de mi zona de comodidad.